Benedicto XVI ha expresado su "preocupación por la gente inocente atrapada" en la frontera entre Libia y Túnez que "huyen de la violencia" en un contexto de "crisis humanitaria", según ha explicado la directora ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PAM), Josette Sheeran.
Sheeran ha mantenido una audiencia privada con el Papa para informarle sobre la misión realizada por la organización en la frontera entre Libia y Túnez, donde el WFP ha procurado "asistencia alimentaria a los más vulnerables" y ayuda "a los países en una transición política a reforzar las propias redes de protección alimentaria".
La Directora del WFP ha subrayado que "el mundo debe reaccionar con urgencia para prevenir un desastre humanitario todavía más grande" ya que "hay más de 2.000 personas dirigiéndose hacia la frontera cada hora".
Sheeran ha recordado que "son numerosas las instituciones eclesiásticas y las organizaciones no gubernamentales de inspiración católica que colaboran de forma estable con la agencia de las Naciones Unidas para la asistencia alimentaria".
Además, Sheeran ha subrayado que "en una fase económica de aumento de los precios alimentarios, del petróleo y los cambios políticos que afectan a millones de personas que sufren el hambre, la ayuda de la Iglesia católica es cada vez más vital para apoyar la acción del WFP hacia los más vulnerables".
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