En Fukushima, el Obispo de la zona Tetsuo Hiraga manifestó que hay también católicos que sacrifican sus vidas en la nuclear "trabajando como voluntarios"
En la actualidad hay 180 voluntarios anónimos que, en turnos de 50, entran en la planta de energía nuclear para llevar a cabo las operaciones de emergencia.
Entre los trabajadores que, en realidad, están sacrificando sus vidas en la planta de energía nuclear de Fukushima, para sofocar la radiactividad en crecimiento y tratar de poner en seguro la central, también hay algunos cristianos. La noticia, que ha llegado a la Agencia Fides a través de algunos misioneros locales, ha sido confirmada por el Obispo de Sendai, en cuyo territorio se encuentra la provincia de Fukushima: “En la tragedia que estamos viviendo y que crea gran preocupación a todos - dice a Fides Su Exc. Mons. Martin Tetsuo Hiraga - sabemos que algunos cristianos están trabajando como voluntarios cerca de la central. En esta terrible situación, los cristianos japoneses tienen una gran oportunidad de ofrecer un testimonio de la propia fe y de los valores del Evangelio. Lo están haciendo en la solidaridad, en la dedicación al prójimo, en el espíritu de abnegación. En Fukushima los trabajadores están arriesgando sus vidas para salvar a la población japonesa y para evitar una catástrofe nuclear”.
En Fukushima, en la actualidad hay 180 voluntarios anónimos que, en turnos de 50, entran en la planta de energía nuclear para llevar a cabo las operaciones de emergencia. En los últimos días, tres hombres que trabajan cerca del reactor n. 3 de la central han sido hospitalizados porque estaban contaminados por la radiación. Según fuentes locales de Fides, el líder del equipo que dirige el trabajo es un cristiano, mientras otros cinco cristianos miembros de una comunidad Battista están trabajando en el proceso de enfriamiento del reactor n 1. y 2. Los fieles están llevando a cabo esta tarea tan delicada y peligrosa "con plena conciencia de estar dando su vida por los demás, en la fe y la oración" y han pedido oraciones a todos los fieles del mundo", para confiar sus vidas a las manos de Dios”.
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